Non ti piace? Non importa! Puoi restituircelo entro 30 giorni
Non puoi sbagliarti con un buono regalo. Con il buono regalo, il destinatario può scegliere qualsiasi prodotto della nostra offerta.
30 giorni per il reso
Frida encarnó cómo pocos el arquetipo universal de la víctima. Su discurso busca a través de sus pinturas y de las vivencias de su propia vida, descifrar el significado profundo de lo inevitable y azaroso (en gran medida) de su tributo de dolor. A través del tiempo la pintora logra sacralizar su herida, adorno estoico irrefutable de presencia y sentencia, cábala y trayecto. Se puede resistir mucho más pesar del que se crea merecer o soportar, pero como afirmaba Jung, no podemos tolerar una vida sin sentido. Las víctimas seculares son creadas a través de la proyección. Los victimarios apoyan y sustentan los valores dominantes proyectando su propio miedo ante el desamparo y la fragilidad sobre todo aquel que se pueda victimizar.Frida personificando el papel de víctima en su condición de enferma crónica así como de mujer sáfica, en un mundo machista y misógino como lo fue el México de su tiempo, alude a todo lo que de víctima todos los humanos podamos tener. Frida al final atrae nuestra mirada y ternura, dándonos un guińo para acompańar, para comprender y en últimas para amar lo insólito de su propia vida.